La pandemia va quedando atrás, y todo se vuelve a activar. Es momento de jugarse para generar las propias fuentes de trabajo. Sólo hay que creer en uno mismo, prepararse, armar el proyecto y actuar. No hay que enfocarse en lo duro que puede ser el camino del emprendimiento, ni pensar en qué pasará si me llega a ir mal. Hay que enfocarse en todo lo que ganarás, si te va bien. Todo es mental. Hay que darse la oportunidad de triunfar. Todo se reactiva y hay mucha demanda en todos los actividades. Para eso, hay seis consejos que podemos tener en cuenta.

1. Conocimientos de ventas.
Las estrategias de ventas, sin duda, son un pilar fundamental para que cualquier emprendimiento llegue al éxito, porque van a determinar su crecimiento y sus resultados. Hay que tener en cuenta que «vender», no es sólo vender un producto, sino que el término «ventas» comprende todas las actividades necesarias para proveer de un producto o servicio a un cliente o una empresa.

2. Saber negociar.
«Negociar» es una actividad o método por el cual dos o más partes interesadas en una misma cosa, acuerdan pautas y buscan llegar a un acuerdo que satisfaga los intereses de ambos.

La clave para una negociación es la conversación. Existen muchos factores que pueden afectar una negociación, pero la conversación es el principal. Hay que tener en cuenta que la conversación no se puede reducir solamente a las palabras que se dicen. El lenguaje corporal y
el tono son importantes, pero existe también un componente emocional que puede afectar enormemente el resultado final. Es común distraerse, e incluso perder los estribos, y perder de vista así lo importante en una negociación. Mantener la calma, y separar a las personas de las dificultades que pueden traer, nos llevará a una visión mucho más clara de la situación, facilitando así un acuerdo beneficioso para todos.

3. Tener conocimientos básicos de administración.
Estudiar administración permite adquirir conocimientos específicos de las diversas áreas, así como desarrollar múltiples habilidades basadas en el liderazgo, la negociación, la comunicación y la toma de decisiones, a fin de lograr una gestión y una organización de cualquier compañía que sean óptimas. Conocer cómo se administra un negocio implica aprender las nociones básicas de marketing, contabilidad, gastos, rentabilidad objetivos, planificación, mediciones, entre otras cosas.

4. Tener un plan de negocios bien armado.Un plan de negocios es un documento breve en el cual se desarrolla la información necesaria para organizar el futuro emprendimiento y los caminos para llevarlo a cabo. En él se describen, en líneas generales, los rasgos principales del rubro elegido, las características del
emprendimiento que se quiere edificar, y cuáles son los resultados esperados. También permitirá tener parámetros para evaluar qué tan buenos son los resultados obtenidos. Lo que se busca es evaluar la factibilidad del proyecto y si es económicamente viable.

5. Capacitación constante y permanente.
Capacitarte constantemente, cuando se es emprendedor, es clave. Cuando uno decide emprender su propio negocio o empresa, hay que entender que la mentalidad tiene que cambiar. Se deja de tener una mentalidad de «empleado», que sigue órdenes de un jefe, que tiene que cumplir un horario determinado, o que tiene que formarse muy de vez en cuando, cuando la empresa te envía a alguna que otra capacitación. Hay que pasar a una mentalidad de «emprendedor», para tener ciertas actitudes que te permitan avanzar en tu negocio: aprender
a pensar de otra manera las cosas, a mantener una mentalidad abierta; aprender cómo mantener una actitud positiva; tener mucho ánimo y energía para enfrentar cada reto que se te presente; poner a volar la creatividad y tener mucha iniciativa propia. La dedicación, la
perseverancia, y la paciencia también son valores fundamentales para ejercitar. Hoy existen muchas opciones para capacitarse, arancelarias y gratuitas, presenciales o con modalidad virtual. Se pueden encontrar seminarios, foros, cursos, talleres, eventos y congresos, para formarnos de manera profesional. Garantizar el éxito de nuestro negocio, y nuestro propio futuro, es responsabilidad de nosotros mismos. Así que no hay excusas… ¡Capacítate!

6. Con la guía correcta, puedes conquistar el mundo.
El mentor es el encargado de brindar conocimientos, consejos y enseñanzas, para capacitar las capacidades y habilidades profesionales. El mentor escucha sin juzgar y guía a las personas, no para decirles qué hacer o qué no hacer, sino para ayudarnos a tener claridad sobre puntos
específicos para que podamos tomar nuestras decisiones. ¿Qué es lo que hace que una persona sea un buena como mentor o mentora? Idealmente, son personas que ya lograron lo que tú buscas conseguir. También debe ser alguien que te agrade lo suficiente como para
pode compartir un café, y a quien le tengas mucha confianza, tanto como para que tú puedas hacerle preguntas complicadas, como para que él tenga la confianza de hacerte críticas constructivas.

Buscar los mentores, consejeros, o guías que te ayuden a lograr tus objetivos, te permitirá conquistar el mundo.

Estos son seis puntos que funcionan como pilares. Dedícate una semana a trabajar con cada uno, y en seis semanas estarías preparado con lo básico. No te aventures a emprender sin esta preparación: éste es tu punto de partida.

Anímate a emprender, y pregúntate: si no es ahora, ¿cuándo?

 

Cacho Avellaneda

Empresario | Consultor Empresarial y Emprendedor

Facebook/Cacho

 

 

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